" Te falta técnica"
Pero la "técnica" es cordura.
Un genio no necesita técnica.
Pero digo yo
¿Qué es la "técnica" sino la ausencia de pasión?
Si quieren pueden intentarlo,
pueden tratar de clavarme en una cruz
pero tienen que saber que
que los estigmas de las palmas de mis
manos ya están gastados
y los clavos que quieran perforen mis
pies no podrán
nunca más parar mis pasos.
Dicen soy un libertino,
un pervertido
tan contradictorio como un Rey se
declara republicano,
otras
un bohemio muy deseado.
Algunas, muchas opinan que soy un
malparido pasado de años,
que no sabe querer,
un egoísta de primer grado.
Otras, un santo que debo ser
canonizado
por cómo he amado dando todo sin
pedir nada a cambio,
pero
todos deben saber que ni en los peores
momentos dejé un amigo
abandonado.
Si quieren sí,
pueden intentar crucificarme, pero
por más lo hagan
no cambiaré en nada,
me sobra libertad para esta vida y los
próximos cien años,
Ruben Mangiagli
Cielo,
Valencia,
21 de octubre,
19, 15 hs
Las formas dantescas de las nubes más el ocaso del sol,
a veces cómo en mí.
a veces cómo en vos.
Ruben Mangiagli.
Una mujer eléctrica me
aguarda
así que es hora de emprender
un viaje
si ella me quiere iluminar,
por más tormentas de tiempo
tenga que afrontar,
aunque la distancia sea más
larga que a una estrella
que no puedo
mirar,
quizá ella me pueda guiar,
quizá me quiera esperar
Es el momento de arrojar
calendarios para que
se hagan
algas en lo profundo de las
aguas de mi nunca
jamás.
de descartar recuerdos que se
hicieron miedos
tan arcaicos que no los
quiero recordar,
de creer para crear,
y que mis pasos unan
las costas de
un océano y un mar
mientras algún sueño, pueda,
se haga realidad.
Ruben Mangiagli
Quien quieras que seas hoy
estás perdonada.
Por más des a otro esos pegajosos besos de ensueño.
Tu mirada,
completa en esos ojos angustiados, llenos de amor,
inundados
por todas tus esperas,
siguen siendo míos,
nadie podrá mirarlos como los vi yo.
Sí, estas perdonada,
valió mi pena haberte amado
aunque yo me haya quedado con tus esperas en mis
sueños inacabados
y este amor de una sola dirección
que no me lleva a
ningún lado.
Ruben Mangiagli
La ciudad está dormida,
parece nada respira,
el frío huye de si mismo,
las veredas son un cementerio
de rastros sin dueños,
es como si las almas
huerfanas
levitaran muy cerca del suelo,
yo solo cruzo su silencio,
y tengo miedo que despierten
mis pasos
en el abandono
de una esquina,
todos y cada uno de tus recuerdos.
Ruben Mangiagli
Me acuerdo cuando era chico e iba en el auto con mi papá mi pregunta recurrente era:
Falta mucho?
Y me respondía:
No importa el tiempo sino llegar bien.
Hay respuesta te sirven para toda una vida.
Ruben Mangiagli
Buenos Aires :
Cuídate ciudad porteña, porque yo tengo que volver algún día, cuídate Argentina no caigas en la crónica de una tragedia anunciada, tengo que volver porque están mis amigos, mi familia y una mujer que no voy a nombrar y mi historia te aseguro contigo no termina en esta vida ni en la eternidad.
Y se volverá a llenar La Gran Vía, los bares abrirán para que los artistas, escritores y todos podamos festejar que pudimos despertar de un mal sueño jamás pudimos imaginar, lloraremos a los muertos y cómo siempre volveremos a empezar.
Pongamos, que siempre hablamos de Madrid.
Y Roma volverá a ser Roma, aunque sea desde cero cómo la hicieron Romulo y Remo, las legiones de Cesar, nuestros abuelos en la trincheras, y ahora nosotros a corazón abierto cumpliendo una y mil cuarentenas.
Existen esos besos que nunca
se terminaron,
las caricias que se siguen
sintiendo
más allá del cuerpo y que nadie
puede explicar
porqué han superado incluso
los limites de la
eternidad,
es un amor que nunca se va y
se queda
a pesar el empeño ponemos
en quererlo olvidar.
Y ya está,
no hay que escribir nada más,
es el amor de tu vida,
el que siempre recordarás,
con un nombre propio que ya
no te atreves a pronunciar,
por dolor,
respeto,
por honrar la felicidad un día
tuviste y
que esperas volver a encontrar.
Ruben Mangiagli
Besos que fueron dados
bien y exactos,
que no se perdieron,
que se alimentaron
de suspiros, latidos
y siguen vivos en
los sabores aprendidos
que todavía perciben
los labios
como abrazos de bocas
que olvidaron
las palabras
porque no necesitan la
identidad del idioma
hablado.
Memorias de un instante,
que parecen
recuerdos de ahora,
o de un siglo atrás al
que le sobraron años.
Los besos bien dados
sobreviven
al dolor,
el olvido,
y al desamor del amor
negado,
y puedes ponerlo en tu
mano,
soplarlos al viento
para enviarlos a alguien.
ellos sabrán llegar a su
destino,
aunque nunca te dirán
cuando.
Ruben Mangiagli
En el norte en primavera
y en el sur en otoño,
nadie sabe porqué,
durante un lapso del tiempo
las hadas y duendes
de nuestros cuentos
volvieron a habitar
los bosque desiertos
de humanos
que estaban encerrados
en sus casas,
esperando,
solos, esperando.
Ruben Mangiagli
¿Sabés que le pedí a DIOS?
Que te cuidara!
EL sonrió y me mostró sus manos. Las cuales tenia cerradas. Y me mostró que dentro de ellas estabas Vos!
Me volvió a sonreír y me dijo: "Que crees que le pueda pasar. Si siempre está en mis manos?...
Le dije: “Gracias Señor porque esa persona que tenes entre tus manos es muy especial para mi... El me miro y dulcemente me dijo: "Si para vos es especial, imagínate para mi que soy su Padre”
Tan increíble es la quietud en Valencia, que una gaviota se posa sobre una farola en mi calle a tres km del Mar Mediterráneo bajo el cielo nublado.
Soy el único que tiene un negocio abierto en mi calle. De su interior sale la música que escucho en una acera desierta, es un mundo diferente, pero me pregunto:
Es el comienzo de otro, o símplemente el final del que todos conocemos?
Volveremos a bailar,
los nuevos besos llegarán,
los abuelos estarán en las plazas,
las sonrisas dibujaran nuestras caras,
los niños jugarán en rondas,
y lo que estamos aprendiendo estos días
no lo vamos a olvidar,
aunque tengamos que repetir mil veces
más la conjugación del verbo vivir,
yo viviré...
tú vivirás...
nosotros viviremos,
y esto también pasará.
Ruben Mangiagli
Nos toca llevar una cruz,
invisible,
sin juicio ni condena cierta,
tengámoslo en cuenta:
Hasta Poncio Pilatos
se lavó
las manos por un rato.
Los libros contarán esta
historia
sin nombres propios
porque al final los héroes
seremos todos,
Algunos
muchos más que otros,
es verdad,
pero al menos hoy eso
sí,
recordémoslos
por un día, por meses,
por algunos años,
ellos son;
los médicos, enfermeras
y sanitarios,
y los demás siguen
trabajando,
Un requién para los muertos,
un Padre Nuestro
para los que seguimos
caminando.
Porque:
la esperanza de un mañana
debe ser
nuestro mejor legado.
Ruben Mangiagli
Cae una niebla espesa sobre Valencia, es cómo una especie de tristeza que te traspasa, la gente tiene temor al contagio y las calles se van vaciando de a poco.
Cuando tenes 58 empezas a pensar cosas en las que no habías pensado antes.
Yo solía pensar que envejecer tenía que ver con la vanidad, pero en realidad tiene que ver con perder gente que quieres , físicamente porque la muerte es inexorable, y las que pierdes en el corazón porque ya no queda tiempo para recuperarlas,
Tener arrugas es trivial.
Me rodee de silencios, café y tabaco, de letras que no salen de ninguna palabra, de sentimientos austeros, y entre el blanco y negro una imagen de tu recuerdo quedó fotografiada en las cenizas que se mezclaban entre colillas en un viejo cenicero.
Ruben Mangiagli
Romper mi asfalto,
demoler las piedras hasta sean polvo,
esperar que el viento
lo lleve,
lejos, tan lejos como
para que solo sea una montaña de
mis malos recuerdos,
que aflore la tierra,
y plantar un nuevo comienzo desde
la nada,
desde cero,
aprender a crecer
y a contar de nuevo, aunque poco
sea mi tiempo,
aunque no estés,
esta vez mi camino solo será de
tierra,
y mi locura enloquecerá de nuevo.
Ruben Mangiagli
Busco una ladrona
que entre una noche cualquiera
en mi corazón,
que revuelva mis recuerdos en
los rincones
de los besos no he dado,
que me apunte
con poemas de Neruda si la
sorprendo,
que dispare palabras al aire y
me diga sin miedos
te quiero,
y que se quedé conmigo y me
explique
que todavía se puede amar en
el medio de cualquier
invierno
Ruben Mangiagli
Sólo un artista puede transmitir los fantasmas de una época, el estilo, hacer palpable la atmósfera de un mundo que se perdió.