Las almas también hacen el amor.
RM
Distancia,
.
Se me corta la noche en un filo
que lastima y no sangra,
no hace llorar,
solo duele
cada vez más,
es casi imposible de aguantar
como una cruz de la que
jamas mis
manos se podrán
desclavar.
Me pasa a veces así cuando no
estas, las costumbres
malas se parten
por la mitad
y entonces son más,
no puedo consumar mi locura,
no puedo respirar y
mis costillas
crecen hasta
que aprietan mi
corazón, un imposible que no
tiene realidad,
porque no sé como ni
cuando se quedó
con vos en
algún lugar que jamas pude ni
voy a soñar.
Me siento solo, y en
ninguna palabra te
puedo encontrar
puta distancia que no me deja
tocarte, abrazarte.
Bendito amor
que al menos
me da vida,
hasta el instante que te tenga
a mi lado,
tan pegada que ni la
muerte nos pueda
separar.
Ruben Mangiagli
La historia de Flora y Gatomate XXXVII
.
Si hay alguien que aprendió lo que es paciencia, ese es Gato; Desarrolló una facultad que tenía poco cultivada y hoy la ejerce con maestría redoblada, porque Flora es de patear cuando se enoja y sacar las uñas como una fiera, aunque por supuesto, ni siquiera ella misma se lo crea. Se pierde entre paredes y asfalto; triste, desganada pero orgullosa, porque como buena flora, ella cree que puede ser feliz sola comiendo sardinas y moviendo la cola.
Gato respira hondo, se concentra, echa humo de su pipa y se relame un rato, mientras el alimento balanceado espera aburrido a un costado; no tiene hambre ni sueño y mucho menos calma, en nada se concentra más que en pensar que Flora sin duda, es su amado karma. Entonces la busca, la acaricia con sus bigotes, le ronronea y ella baja la guardia. Lo mira, lo roza con sus orejas y otra vez entienden que si no es juntos, la vida tiene gusto a nada.
V.D.
Poema del NO. ( afin a cualquiera tenga pareja)
.
Dame un beso.
No,
Dame un beso,
No tengo ganas.
Dame un beso.
bueno solo uno.
Dame otro.
No.
Dale,
bueno otro.
Ruben Mangiagli
© 2013
Tanto aire.
.
He hecho todo para estar con vos,
aunque no lo hayas visto
aunque lo hayas
sentido,
caminé el tiempo en mis propios
contrasentidos, algunas
equivocado otras
acertado,
crucé mi soledad de lado a lado,
y aunque a veces me quedé
en el medio te seguí
esperando,
Trepé sobre mis propios hombros
para mirar más lejos de
lo que mis ojos jamas
pudieron,
mis manos tocaron otros cuerpos
sin encontrar ningún
consuelo
y en mis noches te imagine como
un ángel que bajaba a mi
infierno,
por eso te quiero, porque cuando
te miro me veo en tus
ojos que
alejaron de mi mirada el invierno
sin prometer estaciones,
sincera de tus
miedos,
y ahora seguiremos buscando al
fin juntos lo que
queremos,
ese beso que acabe con la distancia
y dejaremos de escribir los
abrazos
que no entienden de letras, para
que los cuerpos descansen
de tocar tanto aire, tanto
viento.
Ruben Mangiagli.
© 2013
Té para uno.
.
¿De que vale este otoño
si no puedo vivir otros?
Es una mesa de un té para
uno, con un mantel
manchado de olvidos
que llevan números
con uno de comienzo y
otros que que no
terminan en ningún
camino.
Hace frio, se empañan los
vidrios y aun no llegó
el invierno,
¿Es que acaso el tiempo
también cambió su
recorrido?
No entiendo lo que ha
sucedido,
es como querer explicar
que el amor se
puede
perder en un suspiro de
aire
que no perdona,
que no repite,
que desconoce el destino
de dos amantes que fueron
uno
y al final se quedaron
partidos,
con la mitad de uno que no
sirve
y la otra que se muere sin
haberlo pedido.
Ruben Mangiagli
© 2013
Ser.
.
Quiero ser tu intelecto,
tu mejor acento,
de vez en cuando estar
en tu pensamiento,
un camionero que en
un descanso de ruta
te cruza y muere por
tus piernas
y suspira por tus ojos
en un aparcamiento,
el guardián de tu
templo,
vigía de tus sueños,
el hombre que esperas
con un café en
invierno,
tu perdición que
conoce mi punto de
encuentro,
un mes en tu día,
un rato de aliento,
el lado que divide tu
orgasmo con un beso,
quiero ser todo,
ser nada
para que me elijas en
cada momento.
Ruben Mangiagli
© 2013
Creación.
.
Ella es la creadora de mis demonios,
las de mi placentero dolor,
la hacedora del bien
sobre los que otros creen
es un error.
Habita mis rincones oscuros
y brilla en su bondad.
No conoce la negación, no pide por
su perdón,
altiva se impone a la razón y hace
con sus manos
los milagros que Dios
jamas se atrevió.
No necesita carta de presentación,
solo sabe pedir con su voz
lo que necesita para
alimentar su perversión
y la mía.
Es mi madre, es mi hija, mi amante,
la que reina en mi cuerpo,
la que incinera mi
pasión
es ahora, es hoy, presente perpetuo,
porque del tiempo
se adueñó
y entre juegos de húmedos fuegos
me hace sentir que mi pasado
jamás existió.
Amen.
Ruben Mangiagli
© 2013
Tres.
.
Duele el amor siempre
es su naturaleza,
su virtud,
su perdición,
en cada caso, en todos
los casos,
en un beso de adiós,
en una canción,
cuando la distancia es
más grande
entre los dos,
en el placer en la cama
cuando me das
tu espalda,
en la mirada que pide
más cuando los
cuerpos no dan más
en este poema que te
extraña y añora
tu voz,
dolor,
placer,
amor,
una trilogía que define
una palabra,
pasión,
que es alma, carne, el
cielo que solo
vemos tú y yo.
Ruben Mangiagli
© 2013
Puertas.
.
Una puerta se abre
pero ninguna se cierra,
¿ Qué habrá detrás de ella ?
Puede que muchas manos
nos esperan de
ansiosas experiencias,
quizá un vacío que se hace
abismo y solo
nosotros caemos y
caemos
sin detenernos,
abrazados a los miedos
que inventamos
pintados de negro,
probamos, elegimos, vemos
y aceptamos,
como demonios santos,
de rodilla oramos en
turnos salteados,
es un secreto que guardamos
en la piel, un tatuaje
de deseo y entrega,
somos nuestro propio altar
de sacrificios en las
noches de luna llena,
y en las otras tan normales
como cualquier pareja
que se quiere y
en un misterio que nadie
entiende nos adoramos
siempre mirándonos y
ya nadie existe, nadie queda,
solo nosotros y
la próxima puerta.
Ruben Mangiagli
© 2013
Tren.
.
Todas las esperas, los retrasos, las promesas, los cuerpos amados y olvidados, las distancias que se disfrazaban eternas, los besos de palabras,
las manos que escribían orgasmos, los momentos adeudados se esfumaron, el tren no había pasado de largo, estaba llegando y ella dispuesta lo estaba esperando...
RM
Femineidad.
.
Sentí tus palabras como un
nuevo despertar,
una voz que podría
asegurar que no merecía
escuchar,
perplejo de mi virilidad las
respuestas encontraron
las preguntas que
jamas me atreví a
pronunciar,
fue un dolor extraño, como
nacer de nuevo y
volver a respirar,
que la carne encuentre su
exacto lugar junto
a mis huesos y aprender
a caminar
y darme cuenta que había
vivido un sexo santo
sin ninguna virginidad, mis
manos adormecidas
de tanto amar
sin amar, fueron tacto que
que volvieron a aprender
a tocar, y mi miembro
como nunca se
inundo
de sangre como homenaje
a tu femineidad que
era letra,
mirada,
caricia,
el placer del dolor que
sabe gozar,
y los susurros se mezclaron
con besos y silencios
presagiando
la muerte de los cuerpos,
indefensos, cubiertos
de aromas y esencias
en un duelo
de segundos
que contenía el secreto de
la eternidad.
Ruben Mangiagli
© 2013
Partida.
.
Y ella movió las fichas,
como una maestra, la dueña de
todas las estrategias,
una a una hizo desaparecer
las piezas que simulaban las
formas de otras,
las que querían ser al
menos parte del juego vestidas
de alfiles negros,
otras que simularon ser
importantes y subidas a caballos
pensaron era una carrera,
a las que soñaban podían
ser rescatadas de una torre y se
creían princesas,
y las muchas como
peones que esperaban el milagro
de terminar enteras,
pero la suerte del
Rey ya no tenia vueltas, no había
juego que valiera,
había llegado la Reina,
jaque mate al Rey, la partida era
solo de ella.
Ruben Mangiagli.
© 2013
Daño.
.
Es así aunque no lo quieras
contar
siempre dañas a la persona
quieres más,
la que no debería estar
en ese instante, en ese lugar,
tomas la rosa mas dulce y
la aplastas sin saber que los
pétalos que caen
no brotaran de nuevo jamas,
rompes el corazón amable
con palabras
que hacen sangrar,
apresuras, dichas sin pensar,
Así que si te lastimo amor
mio, no es que no sepa amar,
te amo tanto,
que te tengo que lastimar.
Ruben Mangiagli
© 2013
Entre sabanas.
.
Noche a noche te espero
en las esquinas
de mi vida,
en esas calles que llevan
tu nombre,
donde las flores se
mezclan con la poesía y
la oscuridad se ilumina
con guirnaldas que sin
saberlo imitan
tus ojos que siempre me
miran, en un arco de
verdes
que va colgado
en un degrade desde tus
parpados hasta mis
manos,
eres mi viaje
privado, el descanso tan
esperado, el resumen de
un relato que se
comprime y se dilata en
una palabra que solo
nosotros sabemos y que
se repite infinitamente
y se desparrama
entre suspiros y sabanas.
Ruben Mangiagli
© 2013
Por partes.
.
Me gustas
por partes,
algunas enteras
otras desiguales,
amo la extraña simetría de tus
piernas que logras
en los ángulos
que se abren y
cierran,
y su ascendencia.
Tus ojos de verde
tierra donde
el tiempo
siempre me espera,
sin urgencias que se disfrazan
de impaciencia,
que al final son
la mirada de tus manos
que se hacen tacto
en las caricias ansiosas de lunas
que juegan en el
sol de
mi entrepiernas,
tu sonrisa,
tus labios,
tus pechos,
tus infinitas pecas,
que junto con tus cabellos forman
la definición exacta
de belleza
que se funde en lo intangible de
tu alma
de mujer buena y
eres el mapa de mis
sentimientos,
el principio y el final de todas
mis referencias,
la metáfora perfecta,
la noche,
el desayuno y mi
merienda,
el café que excita mis venas y
sobre todo
la paz que calma mi locura,
la dueña de todas
mis letras.
Ruben Mangiagli
© 2013
Elección.
.
No hay luna, no hay sol,
no puedo explicar que ella es mi oscuridad,
que habita y desvasta mi
alma que la espera de una forma inedita que
parte mis costillas y no
sangran, y que de mis dedos brotan letras e
imágenes que se hacen
palabras escritas en las paredes del túnel y
el abismo que jamas
me acerca a mi infierno que oculto en mi
perfecto mundo cordial
y correcto que presento a todos mis miedos.
Solo puedo decir que la
quiero en mis sueños negros, en una parte
de mi realidad que supe
cubrir de duelos de amores muertos, solo
ella puede salvarme de
una eternidad que no deseo con este amor
desconocido sin historias
que recorren mis venas como fuego de los
que jamas quisieron ser
elegidos, de los que prefieren tener menos
de un día a la mujer amada,
a una vida vacía de otras, llena de la nada.
Ruben Mangiagli
© 2013
Senda.
.
Tus manos siguen la senda de mi desnudo cuerpo y desembocan en los oscuros rincones de mis deseos, y allí, cual firmes centinelas del mayor tesoro que poseo, y cual ladronas de cuento, se apoderan de mi voluntad de que está tan dura como hierro.
RM
Azazel.
.
Cómo si el fuego fuera elemento
único,
se contuvo
el calor necesario en los extremos
de los cuerpos,
porque la tierra se quedó en tus
ojos,
el agua es marea entre tus piernas
que atrae
la ingravidez
del aire
que se hace
viento en los suspiros que logran
escapar
de los besos.
Es una boda anunciada sin fecha,
sin banquetes,
ni vinos,
donde tú me invitas y yo
te invito,
mientras Azazel contento mira a
sus hijos
pródigos que decidieron
volver al
infierno,
con testigos que se
suman
en guirnaldas de caricias
que saben de carne y los deseos.
Ruben Mangiagli
© 2013
Nota del autor:
De acuerdo con el libro de Enoch, Azazel fue el líder de los grigori, un grupo de ángeles caídos que practicaron el sexo con mujeres mortales . Él enseñó a los hombres cómo forjar las armas de guerra enseñó a las mujeres el ocultismo( magia,brujería,tarot,etc..
Tanto aire.
.
He hecho todo para estar con vos,
aunque no lo hayas visto
aunque lo hayas
sentido,
caminé el tiempo en mis propios
contrasentidos, algunas
equivocado otras
acertado,
crucé mi soledad de lado a lado,
y aunque a veces me quedé
en el medio te seguí
esperando,
Trepé sobre mis propios hombros
para mirar más lejos de
lo que mis ojos jamas
pudieron,
mis manos tocaron otros cuerpos
sin encontrar ningún
consuelo
y en mis noches te imagine como
un ángel que bajaba a mi
infierno,
por eso te quiero, porque cuando
te miro me veo en tus
ojos que
alejaron de mi mirada el invierno
sin prometer estaciones,
sincera de tus
miedos,
y ahora seguiremos buscando al
fin juntos lo que
queremos,
ese beso que acabe con la distancia
y dejaremos de escribir los
abrazos
que no entienden de letras, para
que los cuerpos descansen
de tocar tanto aire, tanto
viento.
Ruben Mangiagli.
© 2013