Una nada que completa un
vacío
de todo,
la maldita distancia que
provoca
conocerte y hace
de la cercanía una
lejanía
de utopías
no cumplidas,
como estrofas obsoletas de
una
profecía que se
repite mil veces hasta
ser cierta por tanta
mentira.
Silencio de un siglo o un
día y
palabras de hielo,
una parte es un agujero en
el tiempo
y la otra, esas silabas
unidas que
lastiman, cortan,
laceran las frases como
una nota
oculta de una sinfonía
que nadie
escucha entre ruinas de
flores
jazmines y girasoles
que son ahora
suspiros mudos de
memorias.
De tanto saberte aprendí
a no conocerte,
y vos de tanto esperarme
a que jamas llegue,
reversos de versos no
escritos
que fueron sentimientos,
todavía nos queda una
pregunta, y esa es
la incógnita irresoluta
¿ Qué hacemos ahora si
el amor es verdadero ?
Y sin respuestas morimos
por
miedo a comprobar
a que sea cierto.
Ruben Mangiagli
©
2016