No ser nadie más sino vos mismo, en un mundo que está haciendo todo lo posible, día y noche, para hacer que seas alguien distinto, significa luchar la más dura batalla que cualquier ser humano pueda enfrentar y que no acaba hasta el último día respires.
En unos años si seguimos esperando:
Vos la Reina de PAMI
yo, el príncipe de la Seguridad Social,
Argentina y España unidas por un amor en un Geriátrico,
Jacuzzi, bidet, barra libre de pañales
No sé, imaginalo...
Inclino mi cuerpo,
me estiro
miro hacia mi vértigo
de un descenso
que dura
unos segundos
de siglos
que no fueron
y trato de no ver
lo que pasó.
Desciendo, desciendo
hacia la flor.
Y cuando allí estoy la
arranco
y la tomo en
mis manos como esperanza.
Un poco de belleza,
otro motivo sin ninguna razón.
Luego viene el ascenso.
¿Quién se merece la flor?
¿La necesitas tú o yo?
y me pregunto,
¿Quien de los dos tuvo
menos amor?
Ruben Mangiagli
Me he encerrado en
la oscura esfera de lo más oscuro,
ha inundado mi ámbito
mi tiempo,
mi razón
y bajo esta cúpula
no estas vos,
solo tres luces
que ni siquiera sé lo que no son.
Ruben Mangiagli
Estaba pensando que,
por regla general, es imposible entender los motivos de una mujer alienígena y la Tierra está llena de ellas,
es uno de los imposibles del Universo.
La gente cree que es un fracaso vivir solo, pero no lo es. El fracaso es vivir con alguien porque no puedes enfrentarte a nada más.
Quiero contarte
de mi último día en la tierra,
el de dos meses atrás,
me cuesta recordar es verdad,
son como fotos de un álbum
desordenado,
instantes con sabores y olores
húmedos de sal
otra realidad,
amigos, charlas de bar con
gente que no volveré a ver jamás.
Tu sonrisa con
la belleza de las calles al caminar
la promesa nos
veremos pronto para podernos
abrazar,
y mis ganas de llegar
a casa para descansar para al
otro día
volver a comenzar,
un café caliente, un cigarro sin
acabar.
No hay nada más que destacar
salvo la ignorancia,
que todo, pero todo, todo nunca
volverá a ser igual.
Ruben Mangiagli
La fantasía no es una vía para escapar de nuestra realidad, sino una invitación para profundizar más en ella.
El cantero del boulevard de mi calle se permite hacer crecer pequeñas maravillas sin el hombre.
Estábamos en el Burger y me quedé mirando un instante su manera de lamerse la mayonesa de la comisura de los labios que sugería que podría ser igualmente buena lamiendo mayonesa de la comisura de los míos.
¿Cuánto tiempo debemos dejar que la vida nos cambie?
¿Cuánto tiempo deberíamos intentar cambiarla nosotros?
A pesar de todos los problemas de este planeta, no estamos aquí para salvar el mundo, sino para enamorarnos de él.
Destino que se desplaza cumplido pero persistente por una calle hacia a un fin del mundo conocido.
Y a pesar de todo a veces ocurre,
por la noches,
entre sueños y desvelos
bajo donde viven ellos
para vengarme,
para mirarles y someterlos,
hago que crujan los suelos y
tiemblen las vigas de los techos
para despertarlos,
y brillo de pronto como un blanco
esqueleto en
los cristales que reflejan
sus propios recuerdos,
Sí, mis demonios me tienen miedo,
saben que soy peor que ellos
cuando estoy despierto.
Ruben Mangiagli.
Cada emigrante es una península, con una mitad unida a tierra firme y la otra mirando al océano.
Una mitad conectada a la realidad de su tierra actual, y la otra mitad deseando que la dejen sola contemplando el mar para soñar en regresar.
