Vos
entendiste mis letras,
cada
una,
en
el desorden del abecedario de un
amor
que supo ser
de
los dos,
sin
un principio, sin un adiós,
nunca
tuvimos las
mismas
estaciones,
ni
el mismo sol,
y
aun así todo sucedió,
no
hubo posibilidad alguna de elección,
no
supimos evitar querernos,
no
entendimos el dolor,
aun
sabiendo que uno más uno
siempre
serías vos,
siempre
seré yo.
Ruben
Mangiagli
©
2014