Archive for septiembre 2014
Por el medio.
.
70.
.
Escondida en tu desnudes, entre gatos, entre mi memoria, tan cerca de mi corazón, tan lejos de mis manos.
RM
Honrar el amor.
.
Todos tenemos un corazón y la creencia que allí nace, vive y muere el amor, es un concepto muy antiguo que aun sigue vigente hoy.
Entonces si solo tenemos uno al entregarlo se supone que nos quedamos sin él , o en todo caso y si tenemos suerte otra persona nos entrega el suyo y vivimos con ese.
En realidad no tenemos solo uno para sentir, por eso nos enamoramos varias veces en la vida, con diferente intensidad según la edad, en forma de torbellino, en forma tranquila, da igual, pero es amor, y ahí si el concepto cambia, hay varios corazones pero solo existe un amor.
Por eso hay que honrar el amor, siempre, sin excusas.
Amar implica mil cosas diferentes, ilusión, proyectos, futuro en su forma más benigna pero también puede ser desasosiego, devastación, dolor y finalmente todo se resume en ese vacío de quedar solo, la síntesis de la soledad.
El amor, ese sentimiento hay que guardarlo, porque no cambia, cambian las personas a veces, pero no el sentimiento, por eso hay que respetarlo.
Yo he amado tres o cuatro veces en la vida, y lógico no prosperaron, es posible que parte de esa culpa sea mía, soy huraño, amo mi soledad y mis espacios, es fácil me quieran, es difícil me quieran para siempre.
Por eso agradezco los momentos que las mujeres me quisieron me regalaron, días, meses, años, fui feliz, y eso no es poco.
El tiempo luego de las rupturas apacigua el dolor, la angustia del abandono, aunque yo no soy de tener esos sentimientos se los he provocado, pero las aguas bajan y el rio vuelve a su cause.
Por eso hay que honrar el amor, a las personas nos quisieron.
Saber querer es respetar lo que sentimos y sintieron, saber querer bien también es dejar ir y quedarse con los buenos recuerdos.
Ruben Mangiagli
Tan solo.
.
Cómo decirte que aun andas por dentro de mi,
que estás entre mis costillas
en ese espacio
que protege mi corazón de todo,
menos de vos,
me recorres desde mis letras a mis dedos, sin
viceversas, cuando soy recta,
cuando muero
todavía si recuerdo tus curvas
hoy desiertas.
Lo admito, es menester diga la verdad, así no
te puedo olvidar porque
por más no te
piense aun estas en mí, dentro,
arriba, debajo,
en todos lados, hasta afuera de lo que está al
alcance de mis manos,
en las flores, en
este otoño cercano que parece
un invierno olvidado,
en los faroles que todavía iluminan la noche
de esa calle parecida a tus
ojos, en mis días sin vos, tan solo,
tan de contramano.
Ruben Mangiagli
69.
.
Arriba, abajo,
de costado,
ingrávidos,
ocupados, ambos,
preludio, final,
no importa el
resultado,
un número,
ningún abecedario,
y si terminamos
los deberes juntos,
aprobamos,
pero repetimos,
extraña contradicción
de placer privado.
Ruben Mangiagli
©
2014
No saber.
.
No puedo entender este no saber,
si yo de tí conocía todo,
el sabor de tu boca,
las palabras obscenas,
tu llanto y tu tristeza.
Había aprendido cada palmo de ti,
el espacio entre tus
dedos
por las
no caricias que te
dolían y
se hacían esperas
entre desencuentros,
de tu cuerpo en los
ángulos muertos,
Entendía cada una de tus ideas y
los deseos sin dueños,
la melancolía de este
amor,
o mejor dicho,
de ese amor
que fue tan nuestro.
Nunca puedo olvidar nada ti, ni
siquiera
los girasoles que eran
el meridiano
de tu vientre y ya no
los encuentro.
Extraño de ti tanto, sobre todo
los te quiero,
quiéreme,
los
te imagino y te pienso
cuando hacíamos
memorias para justificar
los recuerdos.
No puedo entender este no saber,
no lo comprendo.
Ruben Mangiagli.
68.
.
En mis ojos archivo los rincones de tu memoria, para poder verte entre mi café, mis libros , un minuto antes de dormirme y el primero cuando me despierto.
RM
©
2014
Aeropuertos y ciudades.
.
no se podía ir, no se podía quedar.
tiempo que los encontró donde
no había ningún lugar,
nubes y la no realidad,
los mapas, las estaciones entre
la luna y la estrella polar.
nunca, quizás y el jamás,
siquiera respirar,
poema que terminó antes de
empezar.
67.
.
La promesa.
.
66.
.
A falta.
.
A falta de ti me bebo un café.
me fumo un cigarro,
casi no duermo,
te imagino
A falta de ti me aprieto
las entrañas para
que no se escapen los suspiros
y grito en silencio
tan fuerte pero no tuerzo
el destino,
a falta de ti me emborracho
para caer dormido
y encontrarte en mis sueños
para perderte de nuevo
cuando abro mis ojos y
ya no te veo.
Ruben Mangiagli
La quiero.
.
La sigo queriendo como puedo,
en mi memoria, en
cada recuerdo,
entre gritos que solo escucho yo
perdido en ella,
ausente de mi mismo,
en ese estado de letargo que es
como el sueño pero
no me duermo,
en la soledad de mi cama mirando
sin ver, adivinando
su rostro
en el techo y perdiendo mi imagen
entre los espejos donde
ya no me reflejo.
y si me preguntan por qué la quiero
aun, hay tantas respuestas
que me desvelan,
no era perfecta, no, un poco grosera
se extraviaba entre
mis esperas,
y sabia quererme, eso extraño, como
si la ausencia sea más
fuerte
por creer que me quiso como jamas
nadie en la vida me
ha querido,
y yo aun la quiero, aunque ella no lo
sepa , lo intuya, o ni siquiera
me lea,
la quiero si, yo todo, mi cuerpo mi
alma y cada una de mis
letras
que se reescriben infinitas en todos
los poemas que no
hablan de ella.
Ruben Mangiagli
Tres.
.
todo suma a lo que resta, es vida, propuesta,
una mano, dos, tres que se buscan
sin experiencia,
besos de sexo, de deseo, un despertar
a lo prohibido,
las bocas se mezclan indefinidas, sin tregua
y los cuerpos no tienen dueños
es un vinculo nuevo, mas allá de
lo aprendido,
hay un nuevo amor sin celos, sin sueños que
vive ese momento,
no hay nombres propios, ni géneros,
es una noche de tres,
un nuevo delirio que altera todos los sentidos,
que será un recuerdo de tactos
voces y gemidos,
tres personas que se encuentran,
se desean
y lo demás no se cuenta, un secreto compartido,
mientras el mundo gira y los tres van
en ese contrasentido,
vuelta, viceversa, no importa los lados, las veces,
ni las veredas rectas,
todo son curvas que se cruzan en rayuelas,
cielo, tierra, da lo mismo, solo se juega,
porque,
por la mañana solo sera una historia que se hará
sonrisa y nadie se dará cuenta.
Ahora.
.
Es tiempo que te vayas, es tiempo
que me quede,
no es necesario una fecha, un año,
una estación,
que no queden memorias
ni besos huérfanos de ocasión,
que los aniversarios solo sean un
día más en el calendario.
Sé que no necesitas mis manías y
mis esperas,
que ya olvidaste el sabor de mis
palabras con gusto a tabaco,
que no soy parte de tus sueños y
nada quedo de los desvelos.
Aunque un día me eches de menos,
y una noche
cualquiera te asalten recuerdos y
que mi nombre murmures
cuando necesites un consuelo.
Tienes que irte, caminar y alejarte
muy lejos,
y yo quedarme parado,
para la distancia que tanto
odiadamos al menos una vez nos
sirva de algo,
y no seamos nada, solo personas
que se pierden
como nos perdimos una noche de
febrero,
sin adiós, sin saberlo, como esa,
tarde nos conocimos,
donde eramos extraños que jamas
debieron encontrarse
pero lo inevitable fue tan fuerte,
como ahora lo es este
momento.
Ruben Mangiagli