Hay días que cambiaría las letras
por poder pintar,
palpar los colores, dibujar.
No puedo con palabras a veces o
casi siempre
expresar en todo lo que quiero
contar,
que los demás de un golpe de
vista puedan
reconocer lo que mis manos
quieren crear.
Que no siempre mis silabas se
vistan de negro
como el alma simula existir en
mi cuerpo,
poder cambiar los estilos, formas,
que el verde se vea
con claridad si extraño
el color de sus ojos sabor
de mar.
Solo una vez, que mi arte difuso
salga en un cuadro
y que mis dedos sean pinceles
para poder descansar de tantas
rimas que
son de todos,
pero no
de quien quiero y es mi verdad.
por poder pintar,
palpar los colores, dibujar.
No puedo con palabras a veces o
casi siempre
expresar en todo lo que quiero
contar,
que los demás de un golpe de
vista puedan
reconocer lo que mis manos
quieren crear.
Que no siempre mis silabas se
vistan de negro
como el alma simula existir en
mi cuerpo,
poder cambiar los estilos, formas,
que el verde se vea
con claridad si extraño
el color de sus ojos sabor
de mar.
Solo una vez, que mi arte difuso
salga en un cuadro
y que mis dedos sean pinceles
para poder descansar de tantas
rimas que
son de todos,
pero no
de quien quiero y es mi verdad.
Ruben Mangiagli.
© 2014