Insomnio, o solo sueño que no tengo sueño, pero sueño despierto y a veces la veo y me duermo, y entre sueños sigo porque no quiero dormirme por si la encuentro.
Ruben Mangiagli
Que el tiempo y el espacio nos encuentre,
aunque sea en una
estrella o el paso
fugaz de un
cometa,
o en algo tan simple
como un café cerca
de Recoleta,
o quizá caminando por
una calle cualquiera
de Valencia.
Que tu mirada me busque o yo te
encuentre
por tu aroma de mujer mezclado en
otoños y primaveras,
y que el tiempo sea
benévolo en años
y estaciones
y la distancia sea tan cerca como
un beso
robado a la vida que
quizá nos espera.
Ruben Mangiagli
Cuando ella sonríe mi mundo es mejor
y me olvido del dolor,Cuando el respeto llega antes que el amor, cualquier historia de amor se convierte en una historia de amor perfecta.
He mirado el tiempo,
en relojes, cuadros, acertijos y sortilegios,
segundos que nunca fueron,
minutos de caricias y besos,
en días perdidos, cansado de olvidos.
lo he visto rodeado
de años que he perdido
y mil momentos que llevo muy dentro y
fuera de mi cuerpo.
En los ojos de cien mujeres y
los parpados cerrados de mis hijos dormidos.
Es todo tan relativo
parece ayer que estuviste conmigo
y un siglo que te has ido.
En esta soledad obligada en casa,
indolora y cruel,
húmeda de lluvias pasadas en cataratas de
ficción, letras y poesías
que mueren ante una televisión
me pregunto
en este mini mundo de café y licor si el
amor tendrá tiempo
para el amor o tan solo habrá que darle
cuerda a un viejo reloj
que hable de una historia que fue mía
pero nunca de los dos.
Ruben Mangiagli
Te cambio
mi corazón, te doy el mío
para que
aunque sea por un rato
sientas como te quiero,
aunque solo
sea en la brevedad de un
latido
y poder recordar
que un instante de un
día alguna vez me has querido.
Ruben Mangiagli
Búscame
en las páginas de un libro,
no cualquiera,
uno que
cuente la historia de un
amor
lejano, de esos que
parecen nunca van a llegar,
seguro
nos podrás encontrar,
nuestra
historia es diferente pero
también.
tan igual a las demás que
te sorprenderás,
pero eso sí,
quédate junto a la ventana,
te prometo
que una mañana diferente
a está me veras llegar.
Ruben Mangiagli.
No hay manera de huir de la gravedad... No importa a qué velocidad vayas, sigues cayendo como una piedra. Eso te hace preguntarte si el movimiento horizontal no será una ilusión. Si no nos movemos sólo para convencernos de que no nos estamos cayendo.
Para hacer el amor,
no siempre hay que hacer el amor,
también se puede con
la mirada de una madre,
un beso de otro mundo en la boca,
un abrazo con que se reanima a los enfermos,
una lectura a media voz,
las palabras de nuestros hijos en un te quiero,
el momento que nos da
la nostalgia de nadie y nada
que echamos de menos con una sola canción,
Para hacer el amor,
solo hay que saber hacer el amor.
Ruben Mangiagli
En el medio del camino,
nadie,
sola,
en el medio de la vida,
maleta,
lugar,
en el medio de un destino,
donde,
llegar
al medio de los brazos de alguien,
estar,
quedarse,
en el medio de algo para más.
Ruben Mangiagli
La historia de nuestros primeros días juntos floreció poco a poco hasta convertirse en algo muy distinto..., y que sólo puedo comparar con la idea de regresar a casa y unirme a un equilibrio que no necesita ningún ajuste, es como si la balanza de mi vida hubiera estado esperándola a ella desde siempre.
Los hijos son la promesa que el tiempo hace a los padres,
un rato más de vida en la eternidad, y que con sus manos harán
lo que no podemos hacer ya y crearan otras que aún ni podemos imaginar.
No hay manera de huir de la gravedad... No importa a qué velocidad vayas, sigues cayendo como una piedra. Eso te hace preguntarte si el movimiento horizontal no será una ilusión. Si no nos movemos sólo para convencernos de que no nos estamos cayendo.
Siempre que una persona te cierra la puerta a su vida hay otra abre las ventanas de su existencia para que te asomes.
Ruben Mangiagli
Ven, asomemos nuestros cuerpos
al abismo
de un beso,
un te quiero,
de un te espero,
un podemos.
Perdimos tanto que puede que
esta vez ganemos.
Si nos caemos
que sea juntos,
asumamos el peligro,
caeremos abrazados y tocaremos
por un instante
el cielo
como los amantes se aman contra
todo, incluso ellos
mismos y
hacen del amor algo bello y digno.
Ruben Mangiagli
El amor perdido es un tipo especial de fracaso, me parece.
Es un recordatorio de que algunos logros nunca llegan, no importa con qué devoción los hayamos deseado;
de que algunas estrellas jamás brillaran, aunque nos paremos a mirar en el borde de cualquier mundo del universo.