Sofía.


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Llegaste una tarde verano de Enero
y desde ese día mi vida cambió,
se había terminado una época
y yo ni siquiera sabia que vos
me traías todo lo mejor.


Lo primero que viste con tus ojos
verdes esmeralda, fueron los míos
llenos de asombro, de admiración
tratando de entender la magia
de tu llegada , de vos mi nuevo amor.


Y creciste pintando las paredes de
mil colores con acuarela y crayon
Me sorprendías con tu sonrisa,
tu alegría al verme llegar
y tus besos y abrazos llenos de sol.


Y pasaron los años , las estaciones
todas las lunas, los tiempos
malos , los buenos, las discusiones
las charlas frente al televisor
entre dibujos animados y juegos de rol.


Hoy ya sos toda una mujer
con todas tus virtudes y algunos
defectos que ya no cambiaras,
pero sos mi hija, mi orgullo
mi mejor poema, mi mejor amor.

Ruben Mangiagli

Sofia año 1997

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